
"periodistas, familias de atletas, personas que abogan por los derechos humanos, y otros visitantes, estarán sujetos a una invasión de las fuerzas de inteligencia china".
El pasado marzo, el Departamento de Estado comunicó su sospecha de que las habitaciones de los extranjeros durante los Juegos serían objeto de vigilancia electrónica lo que ha sido confirmado por varias cadenas hoteleras internacionales en China que han tenido que instalar cortafuegos especiales en los sistemas informáticos de sus establecimientos para garantizar la censura de páginas de internet consideradas inconvenientes por el gobierno chino.
¿Así se promueve el espíritu olímpico?
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