Uno de los momentos más polémicos de las Olimpiadas de 1968 fue cuando los atletas norteamericanos Tommy Smith y John Carlos levantaron el puño en solidaridad con los movimientos en pro de los derechos civiles para los negros. El gesto causó estupor en su momento y ahora se teme seriamente que algunos atletas repitan algún gesto de este tipo al subir al podio por el fuerte impacto mediático que produciría
Una de ellas es la norteamericana Jessica Mendoza que ha reconocido que se está planteando mostrar su solidaridad con las reivindicaciones en defensa de los derechos humanos caso de ganar el oro.
La misma posición defienden los norteamericanos Kobe Bryan y Lebron James, que se han mostrado muy críticos con la posición china respecto a Darfur han anunciado que podrían obviar sus suculentos contratos con empresas deportivas (Nike) y manifestar abiertamente sus opiniones aunque eso les suponga perder dinero. El entrenador norteamericano ha autorizado explícitamente a que sus jugadores se expresen públicamente en el sentido que consideren oportuno.
En todo caso quien será dificil que se mantenga en silencio será el atleta norteamericano López Lomong, nacido en Darfur y con posibilidades de medalla en los 1,500 que ha anunciado expresamente su intención de no callarse ante lo sucedido en su pueblo natal. China es el principal comprador del petróleo sudanés, su principal sostén económico y el principal exportador de armas al país, que han contribuido a incrementar la violencia en Darfur.
Por otra parte no hay que sorprenderse por el hecho de que ni uno sólo de los deportistas españoles haya manifestado la más mínima opinión sobre los derechos humanos en China. Su indiferencia demuestra que en España el nivel cultural e intelectual de la inmensa mayoría de estos deportistas sigue siendo tan mediocre y simplón como hace treinta años...
Una de ellas es la norteamericana Jessica Mendoza que ha reconocido que se está planteando mostrar su solidaridad con las reivindicaciones en defensa de los derechos humanos caso de ganar el oro.
La misma posición defienden los norteamericanos Kobe Bryan y Lebron James, que se han mostrado muy críticos con la posición china respecto a Darfur han anunciado que podrían obviar sus suculentos contratos con empresas deportivas (Nike) y manifestar abiertamente sus opiniones aunque eso les suponga perder dinero. El entrenador norteamericano ha autorizado explícitamente a que sus jugadores se expresen públicamente en el sentido que consideren oportuno.
En todo caso quien será dificil que se mantenga en silencio será el atleta norteamericano López Lomong, nacido en Darfur y con posibilidades de medalla en los 1,500 que ha anunciado expresamente su intención de no callarse ante lo sucedido en su pueblo natal. China es el principal comprador del petróleo sudanés, su principal sostén económico y el principal exportador de armas al país, que han contribuido a incrementar la violencia en Darfur.
Por otra parte no hay que sorprenderse por el hecho de que ni uno sólo de los deportistas españoles haya manifestado la más mínima opinión sobre los derechos humanos en China. Su indiferencia demuestra que en España el nivel cultural e intelectual de la inmensa mayoría de estos deportistas sigue siendo tan mediocre y simplón como hace treinta años...
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