La antorcha ha realizado la última pantomima en America del Norte pasando por las calles de San Francisco en una ceremonia tan ridícula y alejada del espíritu olímpico como las de Londres y Paris por el espectacular cordon policial que ha precisado para sortear a los manifestantes que se le oponen.
Un aparatoso triple cordon policial ha rodeado la antorcha para evitar a los miles de manifestantes que se han dado cita para hacerse ver a su paso. Entre los que protestan habido partidarios de Tibet; simpatizantes chinos; manifestantes que responsabilizan a China por Darfur e incluso nudistas que pedían que los Juegos los celebrasen sin ropa, como en la antiguedad (!). En todo caso, esta ceremonia sigue siendo un verdadero calvario para China: Si en Paris tuvo que coger el autobús para pasearse apagada por las calles, en San Francisco ha cambiado la ruta desde su inicio para sortear a los manifestantes convirtiéndose su cabalgata en una ruta fantasma esquivando manifestantes y abucheos para acabar estando en la calle únicamente quince minutos (!!!) . Para el numeroso contingente policial su prioridad ha sido impedir que la antorcha sea apagada. Los manifestantes no lo han conseguido pero lo que su han conseguido apagar es cualquier posibilidad de que China acabe triunfante en su intento de ganar la batalla de las relaciones públicas...
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